La web de Jose Caravaca

 

Guerra Civil. Fusilamientos del 13 de septiembre de 1.936

El día 9 de septiembre de 1.936, al poco de iniciarse la Guerra Civil en España, el Tribunal Popular de la República juzgó a veintisiete procesados acusados de participar en la sublevación militar para derrocar al régimen establecido. Esta causa fue presidida por don Mariano Sanchez-Roca, actuando también los magistrados sres Lopez Lucas y Balboa Lopez, asi como los miembros del Tribunal Especial, representantes de los diversos partidos republicanos y obreros del frente de izquierdas. Actuaron como defensores  nombrados de oficio, los prestigiosos abogados  D. Luis Llanos, D. Salvador Martinez Marin-Baldo, D. Hernán García, D. Dionisio Alcazar y D. Fernando Fernandez Reyes. Fue Fiscal el Sr. Gomis, quien en su informe hizo constar lo siguiente:

“Se sientan en el banquillo los representantes de la  España retrograda y reaccionaria. Son los individuos que quieren dominar para vivir sin trabajar a costa de los que trabajan para vivir.

Son los genuinos representantes de la España negra. Está en primer término la clase capitalista, representada por Romero, Viudes,  Cierva, etc. Son capitalistas que no han sabido compaginar la actual situación. Yo reconozco los privilegios históricos los políticos, pero no los económicos.

Junto a estos toma asiento el señoritismo, representado por Servet y Conejero. Quieren esos individuos ser mas de lo que en realidad son. Quieren llegar a la nobleza sin darse cuenta que esa nobleza está integrada en su mayor parte por hijos de mayordomos o cocheros. De esa forma se convierten en los edecanes del capitalismo.

Junto a esta clase tenemos a otra mucho mas despreciable. Es el pistolerismo. Integrado por hombres que proceden del pueblo y que por dinero son capaces de disparar contra sus propios hermanos. Deben ser eliminados sin compasión, con ensañamiento, pues han laborado más que nadie en contra del pueblo.

Os voy a decir los nombres de estos para que no los olvidéis. Son Carreño, Ciller, Haro, Gonzalez Egea, Moya y Garcia Montiel. Recordarlos bien cuando llegue la hora del veredicto.

Tenemos también otra representación todavía más terrible. Un representante del clericalismo. Hay un cura que profanando su sagrada cátedra la ha empleado para atacar al Poder constituido. No ha cumplido el evangelio, que es la página mas sublime , que ha servido para fijar los cimientos de la sociedad actual. Ha llegado a pedir que se colocase una horca en cada calle para juzgar a todos los miembros de izquierda.

Nos falta todavía una clase: la militar. Dentro de unos días la juzgaremos. Cumplid con vuestro deber.”

 

cabecera liberal

 

Cuatro días después, el domingo día 13 a las 10 de la mañana, fueron fusilados en el patio de la cárcel diez de estas personas, que a continuación se detallan.

Las ejecuciones se llevaron a cabo de forma precipitada, sin haber obtenido aun el “enterado, cúmplase” del gobierno central, ya que una multitud enfurecida, ante la sospecha de que se iban a producir indultos, se dirigía a la prisión para tomar la justicia por su mano. Normalmente estas ejecuciones se llevaban a cabo en la tapia del cementerio, pero ante la gravedad de la situación lo hicieron en el mismo recinto penitenciario.

Miguel Gallego Alcaraz, era un farmacéutico de 47 años que tenía su establecimiento en la Plaza Camachos num. 8 con el nombre Farmacia San José. Fue declarado destacado enemigo del régimen republicano, ya que en la rebotica se celebraban reuniones a las que asistían elementos militares, entre ellos el coronel Iracheta, y otros paisanos, en cuyas reuniones se tomaban  acuerdos de importancia, con la finalidad manifiesta,  y  en acción conjunta y directa con organizaciones y partidos políticos nacionales, de matiz reaccionario, de preparar en Murcia la rebelión militar latente en algunas provincias, que estalló el dia 17 de julio último, siendo el que dirigía esta actitud delictiva, habiendo sido consecuencia de dichas reuniones la obtención de medios económicos para la compra de armamento con destino a la sublevación, asi como también en la base naval de Cartagena que intentasen alzarse en armas las fuerzas de la Armada. Se le señala como la persona que logró que varios oficiales de artillería se pasaran con su armamento y bagajes al enemigo. La votación de los miembros del Jurado si procedia la conmutación de la sentencia arrojó 12 bolas negras y 2 blancas. Entre los encausados figuraba también su hijo Miguel Gallego Tortosa, de 17 años, acusado de colaborador pero que finalmente fue absuelto.

Angel Romero Elorriaga

elorriaga

Médico especialista en otorrinolaringología, con consulta en la calle de Alfaro, de 50 años de edad, presidente del partido de Acción Popular en Murcia, acusado de ir de común acuerdo con el anterior procesado y unidad de acción, aportando sumas importantes de dinero y de operar efizcamente con su influencia personal sobre los oficiales de la Armada de Cartagena y los de Artilleria de Murcia para que se alzasen en armas contra la Republica. El resultado de su votación arrojó igualmente 12 bolas negras y 2 blancas.

Su viuda Maria Seiquer Gayá junto con Amalia Martin de la Escalera, fundó al final de la contienda la Congregación de las Hermanas Apostolicas de Cristo Crucificado, en Villapilar, Santo Angel (Murcia).

Sotero Gonzalez Lerma

sotero

Cura Parroco de la iglesia de El Carmen, de 61 años de edad, expulsado de esta fue convertida en almacén de aviación, continuó ejerciendo en las parroquias de El Palmar y Aljucer, y al cerrar estas en casas particulares.

Fue acusado de realizar desde el pulpito, profanando su ministerio, una intensa campaña contra la República y sus legitimos poderes, excitando en todos sus sermones a las fuerzas armadas a rebelarse, y prometiendo que en caso de triunfar la sublevación se levantaría en cada calle una horca para ajusticiar a los republica-nos,  socialistas y comunistas, asistiendo también a las reuniones de la farmacia del Sr Gallego para preparar la sublevación en la provincia. 14 bolas negras.

De lo que ocurrió después de su fusilamiento no viene ninguna reseña en la prensa de la época habiéndome llegado por tradición oral. Cuando las autoridades abrieron las puertas de la cárcel para que el pueblo viera que se había cumplido la sentencia, un grupo de gente se apoderó de su cadáver y atándole unas cuerdas lo arrastraron desde la cárcel hasta la parroquia de El Carmen, después de cortarle los testículos y ponérselos en la boca, además de una oreja por un miliciano apellidado Lizán, que la llevó a un bar para que se la hicieran a la plancha y tomársela con un vaso de vino. Ya en la parroquia lo colgaron de una farola junto a la fachada, prendiéndole fuego con gasolina.

Federico Servet Clemencin

servet

Murciano de 35 años, licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid, sin ejercer, Jefe Provincial de Falange Española y de las Juntas de Defensivas Nacional  Sindicalista de la provincia de Murcia, fue detenido en el merendero la Granja en la ctra de Monteagudo, y acusado de venir laborando desde mucho antes del 17 de julio para por medio de la violencia y haciendo levantarse en armas al Ejército y paisanos, derribar al régimen republicano legalmente establecido, de imponer con tales medios otro régimen de fuerza, de terror y dictadura, y a tal efecto el procesado redactó proclamas en las que inducía al Ejército, a la Guardia Civil, a la Aviación y Aeronáutica, a rebelarse en armas contra lo que el llamaba el yugo republicano, sin que se detuviera aquí su actuación, sino que como delegado del Jefe Supremo de Falange Española y a sueldo y al servicio de los partidos políticos reaccionarios, tales como Acción Popular, Renovación Española y Tradicionalistas, tomó a su cargo el persuadir y convencer a las Fuerzas de Artillería de Murcia, a la oficialidad de la Armada de Cartagena, a los del Arsenal de dicha ciudad, así como a la Aeronáutica Naval de la base de San Javier que se alzasen en armas contra los poderes legítimos de la Republica, realizando los mismos hechos en otros pueblos de la provincia, como Ceutí, consiguiendo tales propósitos. El jurado popular sacó en su caso 14 bolas negras.

Alfonso Carrasco Aracil, Fernando Ciller Hita, Gonzalo de Haro Bustamante y Antonio González Egea, todos ellos de Cehegín, y todos ellos también pistoleros al servicio del fascismo y de los partidos reaccionarios de dicho pueblo, fueron realizando preparativos para dar efectividad en Cehegín a la rebelión militar que estallo el día 17 de España, cuyos preparativos fueron utilizados por los mencionados procesados al manifestar el día 18 su adhesión expresa y su simpatía por la rebelión del Ejercito tratando de utilizar los grupos armados de Falange Española para sumarlos a dicha rebelión.


Francisco Moya Rubio y Victoriano García Montiel, vecinos de Calasparra, con igual acusación  que los anteriores.

cumplimiento

 

Además de los ajusticiados, fueron condenados a reclusión perpetua, Francisco Pérez Beltrán, Ricardo Conejero, Adrián Viudes, Enrique de la Cierva, Antonio Piqueras, Francisco Cánovas, Pascual Martinez y Antonio Béjar. Condena de un año de prisión Carlos Rodenas de Calzada, Salvador Moya y Antonio Moya. Seis meses a Nieves Rubio Barceló (Amante de Federico Servet),  Josefina Sánchez Pedreño y Francisco Fernández.